
Mesa sobre acoso escolar y discapacidad
El lunes 24 de noviembre tuvo lugar en el Congreso de los Diputados la jornada “Acabemos con el ‘bullying’: Respuestas al acoso por discapacidad”, organizada por el Consejo Español para la Defensa de la Discapacidad y la Dependencia (CEDDD). El encuentro reunió a representantes institucionales, expertos, familias y personas con discapacidad para abordar un problema grave y creciente: el acoso escolar hacia estudiantes con discapacidad.
Un problema estructural que deja huella
Durante la jornada se recordó que, mientras alrededor del 10 % del alumnado general declara sufrir acoso o ciberacoso, en el caso del alumnado con discapacidad las cifras se disparan. Muchos estudios y testimonios coinciden en que más de ocho de cada diez alumnos con discapacidad han experimentado algún tipo de violencia escolar: burlas, aislamiento, amenazas, agresiones físicas o digitales.
Se trata de una forma de discriminación que no solo afecta a la trayectoria académica, sino que deja un impacto emocional duradero en la autoestima, la salud mental y el sentido de pertenencia a la comunidad educativa.
Voz institucional: una llamada urgente a la acción
El acto fue inaugurado por representantes del CEDDD, miembros de la Audiencia Nacional y cargos del ámbito educativo. En su intervención, el presidente de la Audiencia Nacional advirtió que el bullying “no pocas veces es el inicio de una carrera de delincuencia”, subrayando la importancia de actuar de manera temprana y efectiva.
Desde el ámbito educativo se insistió en la necesidad de avanzar hacia una escuela más inclusiva, con protocolos específicos para los casos de acoso que afectan al alumnado con discapacidad, formación especializada para el profesorado y recursos suficientes en orientación y apoyo psicopedagógico.

Mesa sobre acoso escolar y discapacidad
Mesas de trabajo: justicia, educación y salud mental
La jornada se estructuró en dos mesas redondas:
1. Protocolos y responsabilidad jurídica
Juristas, fiscales y profesionales del ámbito educativo analizaron la necesidad de que los centros escolares dispongan de mecanismos claros, rápidos y homogéneos para detectar y actuar ante casos de acoso. Se destacó la importancia de reforzar la figura del facilitador judicial para menores con discapacidad y la necesidad de adaptar la comunicación y los procedimientos a sus necesidades.
2. Impacto psicológico y papel de las familias
Psicólogos, orientadores, asociaciones y familias compartieron experiencias reales que evidencian el sufrimiento de los menores afectados. Se habló del impacto en la ansiedad, el miedo a asistir a clase, la caída en el rendimiento académico y la dificultad para confiar en sus iguales después de experiencias prolongadas de acoso.

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Testimonios que rompen el silencio
Varios testimonios recogidos durante la jornada pusieron voz a una realidad que a menudo queda oculta.
Una madre relató que su hijo, con discapacidad sensorial, “ha llegado a pedir no volver al colegio por miedo a sus compañeros”. Contó cómo el niño prefería aislarse en casa antes que exponerse a insultos o empujones en el recreo.
Una representante de una asociación de familias explicó que, en muchos casos, las señales de alerta —ansiedad, absentismo, cambios bruscos de comportamiento— se interpretan erróneamente como “problemas de actitud”, lo que retrasa la intervención y deja a los estudiantes desprotegidos.
También se compartieron testimonios de jóvenes que, tras años de bullying, reconocen que lo más dañino no fueron las agresiones en sí, sino sentir que nadie los defendía o comprendía lo que estaban viviendo.

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Declaración final del CEDDD: compromisos y demandas
La jornada concluyó con una declaración institucional que reclamó:
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Que ningún alumno con discapacidad tema acudir a clase.
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La inclusión explícita de la variable “discapacidad” en todos los protocolos contra el acoso.
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La aplicación homogénea de dichos protocolos en todas las comunidades autónomas.
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Refuerzo de los servicios psicológicos y de apoyo especializado.
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Formación obligatoria para profesorado, familias y alumnado sobre convivencia, diversidad y detección temprana.
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Coordinación entre centros educativos, fiscalía, servicios sociales y entidades del ámbito de la discapacidad.
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Recursos suficientes y voluntad política real para hacer efectivos los derechos del alumnado más vulnerable.

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Conclusión
La jornada “Acabemos con el ‘bullying’: Respuestas al acoso por discapacidad” deja claro que el silencio ya no es una opción. Las víctimas necesitan apoyo real, los centros requieren herramientas eficaces y la sociedad en su conjunto debe asumir su responsabilidad. Este encuentro en el Congreso supone un paso firme para visibilizar una realidad dolorosa y avanzar hacia aulas más humanas, seguras e inclusivas.
